Casi una veintena de personas asiste a la jornada para agricultores del equipo del proyecto Diverfarming organizada por la UCO

El equipo de la Universidad de Córdoba que trabaja dentro del proyecto europeo Diverfarming, formado por los investigadores Luis Parras, Beatriz Lozano, Manuel González y Jesús Aguilera, mostraron el potencial de la diversificación de cultivos y las prácticas de bajos insumos en el olivar mediterráneo.

b_450_250_16777215_00_images_diverfarmning-20.pngEn una jornada virtual a la que asistieron casi una veintena de personas, el equipo de investigadores presentó las diversificaciones seleccionadas para introducir en un olivar de Torredelcampo (Jaén). “Estas diversificaciones fueron elegidas hace 4 años por agricultores, asociaciones agrícolas y demás actores del sector”, como recuerda Luis Parras, y han sido azafrán, lavandín y una mezcla de avena y veza.

El objetivo de la introducción de estos cultivos entre las calles del olivar y el uso de prácticas de bajos insumos es medioambiental, pero también económico: se busca el aumento de la calidad del suelo, la fertilidad y la capacidad de capturar carbono, pero también reducir el coste en insumos para que el olivar sea más rentable.

En este sentido, Luis Parras resaltó los cambios apreciados en el suelo del olivar que han llevado a cabo durante tres años gracias al cambio de manejo. A pesar de que la experiencia bibliográfica indica que los cambio en suelo se empiezan a apreciar tras muchos años de cambio de manejo, en este caso, se vieron resultados durante el primer año ya que hubo un aumento de carbono en suelo considerable.

El investigador Jesús Huertas analizó los objetivos del proyecto y el trabajo llevado a cabo por su grupo resaltando cómo la avena y la veza aportaron los beneficios de las leguminosas y las gramíneas aportando nitrógeno al suelo y mejor estructura del suelo, mientras que el lavandín implica un aumento de los polinizadores en campo. En las tres diversificaciones llevadas a cabo se produjo un aumento de carbono orgánico en suelo, es decir, la diversificación de cultivos es positiva para el secuestro de carbono.

Finalmente, la técnica de Industrias David Cristina Castagnotto analizó las posibilidades que hay desde la maquinaria agrícola para manejar el suelo del olivar diversificado y los asistentes pudieron resolver dudas.
Ahora, el camino de estos ensayos continúa con la búsqueda de insertarlas en el mercado y analizar su funcionamiento y llevar a cabo una modelización que permita pasar de escala local a escala global para predecir tendencias.

Diverfarming es un proyecto financiado por el Programa Horizonte 2020 de la Comisión Europea, dentro del reto de “Seguridad alimentaria, agricultura y silvicultura sostenibles, investigación marina, marítima y de aguas interiores y bioeconomía” bajo el acuerdo 728003 en el que participan las Universidades Politécnica de Cartagena y Córdoba (España), Tuscia (Italia), Exeter y Portsmouth (Reino Unido), Wageningen (Países Bajos), Trier (Alemania), Pècs (Hungría) y ETH Zúrich (Suiza), los centros de investigación Consiglio per la ricerca in agricoltura e l'analisi dell'economia agraria (Italia), el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (España) y el Instituto de Recursos Naturales LUKE (Finlandia), la organización agraria ASAJA y las empresas Casalasco y Barilla (Italia), Arento, LogísticaDFM e Industrias David (España), Nieuw Bromo Van Tilburg y Ekoboerdeij de Lingehof (Países Bajos), Weingut Dr. Frey (Alemania), Nedel-Market KFT y Gere (Hungría) y Paavolan Kotijuustola y Polven Juustola (Finlandia).